Indicaciones:
1. Una frase para el recuerdo.
2. Texto: El ciego de Jericó (Lc, 18, 35-43)
3. Comentario para comprender el texto.
4. Videoaudición de la canción "Bendita la luz" de Maná.
5. Breve oración en común.
1. Una frase para el recuerdo.
"Seamos tan diferentes con los hombres como con los cuadros,
a los que tratamos siempre de dar una luz favorable"
(Ralph Waldo Emerson)
2. El Ciego de Jericó.
"Aconteció que acercándose Jesús a Jericó, un ciego estaba sentado junto al camino mendigando;
y al oír a la multitud que pasaba, preguntó qué era aquello.
Y le dijeron que pasaba Jesús Nazareno.
Entonces dio voces, diciendo: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí!
Y los que iban delante le reprendían para que callase; pero él clamaba mucho más: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí!
Jesús entonces, deteniéndose, mandó traerle a su presencia; y cuando llegó, le preguntó,
diciendo: ¿Qué quieres que te haga? Y él dijo: Señor, que reciba la vista.
Jesús le dijo: Recíbela, tu fe te ha salvado.
Y luego vio, y le seguía, glorificando a Dios; y todo el pueblo, cuando vio aquello, dio alabanza a Dios."
3. Comentario para comprender el texto:
Ser ciego hace dos mil años era cosa mala, no existía la bendita ONCE ( lo digo en serio). Jesús se acercaba a Jericó y el ciego, no quiso perder el tren de Jesús Dios, se puso a gritar, a llamarle, a clamar. Los que estaban cerca le rogaban que callase. Cuantas veces, el ambiente, la familia, los prejuicios, el miedo a clamar, la sonrisa de los "compasivos" nos dicen lo mismo: calla, no molestes, eres un ciego, tranquilo ya te daremos unas monedas cuando pase. Jesús le oyó y le dijo que quieres que te haga. "Señor que vea".
Era ciego pero tenía las ideas muy claras. Había oído hablar de Jesús de Nazaret, el descendiente del rey David, que hacía milagros en toda Galilea. Y él quería ver. Por eso, cuando le informaron que Jesús iba a pasar por allí, el corazón le dio un vuelco y comenzó a gritar con todas sus fuerzas. ¡Era la oportunidad de su vida! Cuando consiguió estar frente a frente con el Mesías no fue con rodeos; le pidió lo que necesitaba: “¡Señor, que vea!”.
2. El Ciego de Jericó.
"Aconteció que acercándose Jesús a Jericó, un ciego estaba sentado junto al camino mendigando;
y al oír a la multitud que pasaba, preguntó qué era aquello.
Y le dijeron que pasaba Jesús Nazareno.
Entonces dio voces, diciendo: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí!
Y los que iban delante le reprendían para que callase; pero él clamaba mucho más: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí!
Jesús entonces, deteniéndose, mandó traerle a su presencia; y cuando llegó, le preguntó,
diciendo: ¿Qué quieres que te haga? Y él dijo: Señor, que reciba la vista.
Jesús le dijo: Recíbela, tu fe te ha salvado.
Y luego vio, y le seguía, glorificando a Dios; y todo el pueblo, cuando vio aquello, dio alabanza a Dios."
3. Comentario para comprender el texto:
Ser ciego hace dos mil años era cosa mala, no existía la bendita ONCE ( lo digo en serio). Jesús se acercaba a Jericó y el ciego, no quiso perder el tren de Jesús Dios, se puso a gritar, a llamarle, a clamar. Los que estaban cerca le rogaban que callase. Cuantas veces, el ambiente, la familia, los prejuicios, el miedo a clamar, la sonrisa de los "compasivos" nos dicen lo mismo: calla, no molestes, eres un ciego, tranquilo ya te daremos unas monedas cuando pase. Jesús le oyó y le dijo que quieres que te haga. "Señor que vea".
Era ciego pero tenía las ideas muy claras. Había oído hablar de Jesús de Nazaret, el descendiente del rey David, que hacía milagros en toda Galilea. Y él quería ver. Por eso, cuando le informaron que Jesús iba a pasar por allí, el corazón le dio un vuelco y comenzó a gritar con todas sus fuerzas. ¡Era la oportunidad de su vida! Cuando consiguió estar frente a frente con el Mesías no fue con rodeos; le pidió lo que necesitaba: “¡Señor, que vea!”.
4. Video audición del Vídeo: Bendita la luz, Mana
Letra de la Canción:
Bendito el lugar y el motivo de estar ahí,
bendita la coincidencia.
Bendito el reloj que nos puso puntual,
ahí bendita sea tu presencia.
Bendito Dios por encontrarnos en le camino
y de quitarme esta soledad de mi destino.
Bendita la luz, bendita la luz de tu mirada,
Bendita la luz, bendita la luz de tu mirada,
desde el alma.
Bendito el lugar y el motivo de estar ahí,
bendita la coincidencia.
Bendito el reloj que nos puso puntual,
ahí bendita sea tu presencia.
Bendito Dios por encontrarnos en le camino
y de quitarme esta soledad de mi destino.
Bendita la luz, bendita la luz de tu mirada,
Bendita la luz, bendita la luz de tu mirada,
desde el alma.
Benditos ojos que me esquivaban,
simulaban desdén que me ignoraba,
y de repente sostienes la mirada.
Bendito Dios por encontrarnos en el camino
y de quitarme la soledad de mi destino.
Bendita la luz, bendita la luz de tu mirada,
Bendita la luz, bendita la luz de tu mirada, ooh.
Gloria divina de esta suerte, del buen tino,
de encontrarme justo ahí, en medio del camino.
Gloria al Cielo de encontrarte ahora,
llevarte mi soledad y coincidir en mi destino,
en el mismo destino.
Bendita la luz, bendita la luz de tu mirada,
Bendita la luz, bendita la luz de tu mirada,
Bendita mirada, oh,
bendita mirada desde el alma.
Tu mirada, oh oh, bendita, bendita,
bendita mirada bendita tu alma y bendita tu luz.
Tu mirada, oh oh.
Oh oh, te digo es tan bendita tu luz amor, amor.
Y tu mirada, oh, oh.
Amor amor,
qué bendita tu mirada,
tu mirada amor...
5. Oración en común:
simulaban desdén que me ignoraba,
y de repente sostienes la mirada.
Bendito Dios por encontrarnos en el camino
y de quitarme la soledad de mi destino.
Bendita la luz, bendita la luz de tu mirada,
Bendita la luz, bendita la luz de tu mirada, ooh.
Gloria divina de esta suerte, del buen tino,
de encontrarme justo ahí, en medio del camino.
Gloria al Cielo de encontrarte ahora,
llevarte mi soledad y coincidir en mi destino,
en el mismo destino.
Bendita la luz, bendita la luz de tu mirada,
Bendita la luz, bendita la luz de tu mirada,
Bendita mirada, oh,
bendita mirada desde el alma.
Tu mirada, oh oh, bendita, bendita,
bendita mirada bendita tu alma y bendita tu luz.
Tu mirada, oh oh.
Oh oh, te digo es tan bendita tu luz amor, amor.
Y tu mirada, oh, oh.
Amor amor,
qué bendita tu mirada,
tu mirada amor...
5. Oración en común:
“ Danos tus ojos, Señor para ver por tu ventana;
tus ojos alegres y comprensivos,
para ver el lado bueno de la vida;
tus ojos llenos de dolor y cansancio en la cruz,
para saber perdonar; tus ojos misericordiosos,
para saber amar y mirarlo todo desde el Amor."Amen.